Villafranca del Campo pertenece a la Comarca del Jiloca y sus orígenes se remontan a época romana. Paseando por sus calles encontramos varias casonas solariegas de interesante factura que constituyen buenos ejemplos de la arquitectura urbana del XVIII.
Este municipio se encuentra en el valle del Jiloca, presentando un paisaje típicamente agrario. La presencia del río Jiloca y las zonas de cultivo favorecen que las grulla común se desplacen desde la laguna de Gallocanta para alimentarse por estas zonas.
La base económica se encuentra de manera tradicional en las actividades agrícolas, relacionadas con el cultivo familiar de cereales. Como complemento a las actividades agrícolas, buena parte de las explotaciones agrarias de la localidad cuentan también con una orientación ganadera, destacando el ovino extensivo como sector ganadero tradicional, aunque últimamente se está viendo superado por el porcino que ha crecido exponencial en los últimos años.
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